Frases Emotivas

No pongas tu interés en el dinero, pero pon tu dinero a interés.

La historia es la novela de los hechos, y la novela es la historia de los sentimientos.

Uno de los extremos más necesarios y más olvidados en relación con esa novela llamada Historia, es el hecho de que no está acabada.

Un rey no debe caer nunca de su trono, excepto cuando el trono cae.

La política es el arte de los incapaces de triunfar en privado.

Vivimos en una sociedad profundamente dependiente de la ciencia y la tecnología y en la que nadie sabe nada de estos temas. Ello constituye una fórmula segura para el desastre.

La educación es algo admirable, sin embargo, es bueno recordar, que nada que valga la pena se puede enseñar.

Elige una mujer de la cual puedas decir: Yo hubiera podido buscarla más bella pero no mejor.

Nadie puede usar la palabra progreso si no tiene un credo definido y un férreo código moral… Porque la misma palabra progreso indica una dirección; y en el mismo momento en que, por poco que sea, dudamos respecto a la dirección, pasamos a dudar en el mismo grado del progreso.

Nunca existió una buena guerra ni una mala paz.

El que niega el progreso es un impío; el que niega el progreso niega la providencia, pues providencia y progreso son la misma cosa, y el progreso no es más que uno de los nombres humanos del Dios Eterno.

El trabajo y la lucha llaman siempre a los mejores.

Nada existe más dulce que la miel. Excepto el dinero.

La guerra es el arte de destruir hombres, la política es el arte de engañarlos.

Donde hay educación no hay distinción de clases.

Los hombres son criaturas muy raras: la mitad censura lo que practica; la otra mitad practica lo que censura; el resto siempre dice y hace lo que debe.

El pan más sabroso y la comodidad más agradable son los que se ganan con el propio sudor.

No hablaríamos tanto en sociedad si nos diéramos cuenta del poco caso que hacen los demás de lo que decimos.

El melón y el casamiento han de ser acertamiento

Trabaja en algo, para que el diablo te encuentre siempre ocupado.

La moral es la ciencia por excelencia; es el arte de vivir bien y de ser dichoso.

Curiosamente, los votantes no se sienten responsables de los fracasos del gobierno que han votado.

Casi todos podemos soportar la adversidad, pero si queréis probar el carácter de un hombre, dadle poder.

Inicua es la ley que a todos igual no es.

Mil cosas avanzan. Novecientas noventa y nueve retroceden. Esto es el progreso.

La civilización es la victoria de la persuasión sobre la fuerza.

Hay ocasiones en que un gobierno debe ser liberal y otras en que debe ser dictatorial: aquí todo cambia y no hay eternidad.

Una historia no es sólo verdad cuando se narra cómo ha sucedido, sino también cuando relata cómo hubiera podido acontecer.

Educar no es dar carrera para vivir, sino templar el alma para las dificultades de la vida.

Los hombres, tal como son, se inclinan por naturaleza a ir en pos del dinero o del poder, y del poder porque vale tanto como el dinero.