Frases de Rene Descartes

Sería absurdo que nosotros, que somos finitos, tratásemos de determinar las cosas infinitas.

Para mejorar nuestro conocimiento debemos aprender menos y contemplar más.

La multitud de leyes frecuentemente presta excusas a los vicios.

Los viajes sirven para conocer las costumbres de los distintos pueblos y para despojarse del prejuicio de que sólo es la propia patria se puede vivir de la manera a que uno está acostumbrado.

La primera máxima de todo ciudadano ha de ser la de obedecer las leyes y costumbres de su país, y en todas las demás cosas gobernarse según las opiniones más moderadas y más alejadas del exceso.

Dos cosas contribuyen a avanzar: ir más deprisa que los otros o ir por el buen camino.

No hay alma, por poco noble que sea, que permanezca tan aferrada a los objetos de los sentidos que, a veces, no se aparte de ellos para desear un bien mayor.

El bien que hemos hecho nos da una satisfacción interior, que es la más dulce de todas las pasiones.

Es prudente no fiarse por entero de quienes nos han engañado una vez.

El buen sentido es el que mejor está repartido entre todo el mundo.

Dicen que el mono es tan inteligente que no habla para que no lo hagan trabajar.

No basta tener buen ingenio; lo principal es aplicarlo bien.

Daría todo lo que sé, por la mitad de lo que ignoro.

La matemática es la ciencia del orden y la medida, de bellas cadenas de razonamientos, todos sencillos y fáciles.

Los malos libros provocan malas costumbres y las malas costumbres provocan buenos libros.

Leer un libro enseña más que hablar con su autor, porque el autor, en el libro, sólo ha puesto sus mejores pensamientos.

El primer precepto no era aceptar algo como cierto hasta que supe que, como tal, sin una sola duda.

Si quieres ser un buscador de la verdad verdadera, es necesario que por lo menos una vez en su vida usted duda, en la medida de lo posible, todas las cosas.

Los sentidos engañan de vez en cuando, y es prudente no confiar en su totalidad a quienes nos han engañado una sola vez.

Estoy acostumbrado a dormir y en mis sueños imaginar las mismas cosas que los locos imaginan cuando está despierto.

Cuando no está en nuestro poder para seguir lo que es verdad, deberíamos seguir lo que es más probable.

Excepto nuestros propios pensamientos, no hay nada absolutamente a nuestro alcance.

El sentido común es la cosa más justa distribución en el mundo, porque cada uno piensa que está tan bien dotado que que incluso aquellos que son más difíciles de satisfacer en todos los demás asuntos que no están en el hábito de desear más de ella de lo que ya tienen .

La lectura de todos los buenos libros es como una conversación con las mentes más brillantes de los siglos pasados.

Números perfectos como hombres perfectos son muy raros.