La verdadera ciencia consiste en conocer que se sabe lo que realmente se sabe, y que se ignora lo que en verdad se ignora. En esto consiste la verdadera sabiduría.
Que nadie se haga ilusiones de que la simple ausencia de guerra, aun siendo tan deseada, sea sinónimo de una paz verdadera. No hay verdadera paz sino viene acompañada de equidad , verdad, justicia, y solidaridad.
Una tendencia a la esperanza y la alegría es verdadera riqueza: una para el miedo y la pobreza verdadera pena.
Estoy muy interesado en tener una verdadera libertad de expresión. La verdadera libertad de la fe. Y los libres de la fe religiosa.
Verdadero refugio es lo que nos permite estar en casa, en paz, para descubrir la verdadera felicidad. Lo único que nos puede dar verdadero refugio es la conciencia y el amor que es intrínseco a lo que somos. En última instancia, es nuestra verdadera naturaleza.
Si vamos a enseñar la verdadera paz en este mundo, y si vamos a llevar a cabo una verdadera guerra contra la guerra, vamos a tener que empezar con los niños.
Así, fue a buscar la verdadera civilización y la verdadera justicia para todos los pueblos del mundo, y ver esto como la destrucción de la libertad personal y el respeto es ser atacado por el odio y la emoción de la guerra y de hacer juicios apresurados.
La verdadera satisfacción y de la verdadera justicia, en mi opinión, sólo vendrá para los estadounidenses, y de hecho ahora para los españoles y turcos y saudíes y marroquíes, cuando ponemos fin al terrorismo.
¿Cuál es la verdadera libertad? La verdadera libertad es la posibilidad de no tener a mi manera y seguir siendo tan feliz como si lo hiciera.
Soy un conservador porque creo en la paz - la paz verdadera, no sólo la paz de la mente. Soy un conservador porque entendemos que la verdadera paz viene de la Infantería de Marina, no el Cuerpo de Paz.
El poema no es, como alguien dijo, deflective de entrada. Pero la verdadera pregunta es, '¿Qué pasa con el lector una vez que él o ella se introduce en el poema? Esa es la verdadera pregunta para mí, es conseguir que el lector en el poema y luego llevar al lector en algún lugar, porque creo que la poesía como una especie de forma de literatura de viajes.
Antes pensaba que la verdadera amistad era imposible, pues la vida me había mostrado su otro lado, pero puedo asegurar que si existe porque tengo a alguien por quien levantarme todos los días de la cama y luchar para seguir adelante. Así que si todavía no creéis en la verdadera amistad buscarla que seguro que la encontrareis.
Amigas solo existen cuando hablan bien de ti a tus espaldas y en tu presencia porque una verdadera amiga es cuando dice de que están hablando las otras de ella... eso es una verdadera amiga!
Al realizar en el escenario, soy en realidad un poco corto de vista, así que no tengo ninguna verdadera, verdadera comprensión de lo que el público es como.
La zona interior es el primer lugar de la pérdida de la verdadera vida cristiana, de la verdadera espiritualidad, y el acto pecaminoso externo es el resultado.
Una geometría no puede ser más verdadera que otra, sino que sólo puede ser más conveniente. La geometría no es verdadera, es ventajosa.
No hay distinciones difíciles entre lo que es real y lo que es irreal, ni entre lo verdadero y lo falso. Una cosa no es necesariamente verdadera o falsa, sino que puede ser a la vez verdadera y falsa.
Para que pueda trabarse una verdadera amistad, es preciso prescindir de la superioridad que puedan otorgar la edad, los honores, las riquezas o el poder. El único motivo que nos debe incitar a la amistad es la búsqueda de las virtudes y el mutuo perfeccionamiento.
El amor está muy bien a su modo, pero la amistad es una cosa mucho más alta. Realmente no hay en el mundo nada más noble y raro que una amistad verdadera.
La verdadera explicacion de este mundo, sea cual fuere la del otro, es el amor, no la filosofia alemana.
Jamás en la vida encontraréis ternura mejor, más profunda, más desinteresada ni verdadera que la de vuestra madre.
El laissez faire está caducado. Siendo anti-individualista, la concepción fascista se pronuncia por el Estado; y se pronuncia por el individuo en cuanto éste coincide con el Estado, que es conciencia y voluntad del hombre en su existencia histórica. El liberalismo negaba al Estado en interés del individuo particular; el fascismo reconfirma al Estado como verdadera realidad del individuo. Se pronuncia por la única realidad que puede ser una cosa seria, a saber, la libertad del Estado y del individuo en el Estado. Ello, en razón de que, para el fascista, todo reside en el Estado, y nada que sea humano o espiritual existe fuera del Estado.
La belleza de una mujer no está en un modo facial, subi que la verdadera belleza en una mujer se refleja en su alma. Es el cuidado que ella amorosamente da a la pasión lo que ella muestra. La belleza de una mujer crece con el paso de los años.
Creo que la verdadera razón por la que mi esposa y yo tuvimos los niños es la misma razón por la que Napoleón invadió Rusia: me pareció una buena idea en ese momento.
Escucha, la verdadera poesía no dice nada, sino que sólo marca las posibilidades. Abre todas las puertas. Se puede llegar hasta la persona que más te convenga.
Después de todo el trabajo que los profesores han hecho para nosotros, el lugar al que van a obtener el conocimiento está en los libros. La verdadera universidad de hoy en día es una colección de libros.
La falsa felicidad hace a los hombres severos y orgullosos, y esa felicidad nunca es explicada. La verdadera felicidad los hace amables y sensibles, y esa felicidad siempre es compartida.
Muchas personas tienen una idea equivocada de lo que constituye la verdadera felicidad. No se alcanza a través de la auto-gratificación, sino a través de la fidelidad a un propósito digno.
¿En qué momento debemos dejar irnos y hacer lo que queremos hacer, y cuándo debemos someternos a las reglas? Ponerse de acuerdo con nuestra verdadera naturaleza y saber quién somos realmente siempre ha sido una fascinación para los humanos. Sé que me fascina.
Sin embargo, aunque el verdadero amor sea muy raro de encontrar, lo es menos que la verdadera amistad.
La verdadera gloria se tiró de rodillas y luego volvió. Esa es la gloria real. Esa es la esencia de la misma.
La razón teórica por la cual es erróneo centrarse en la democracia o en la dictadura es que los Estados –todos los Estados– gobiernan a su población y deciden si habrán de hacer la guerra o no. Y todos los Estados, sean formalmente democracias o dictaduras, o algún otro tipo de gobierno, están regidos por una elite. El hecho de que estas elites, en cualquier caso particular, hagan o no la guerra a otro Estado se da en función de un complejo entrecruzamiento de causas, entre ellas el temperamento de los gobernantes, la fuerza de sus enemigos, los motivos para la guerra, la opinión pública. Si bien esta última debe calibrarse en cualquier caso, la única verdadera diferencia entre una democracia y una dictadura en lo que respecta a hacer la guerra es que en la primera es preciso desplegar una mayor propaganda ante los ciudadanos para formar a la opinión pública de modo que sea favorable a los propósitos del gobierno. La propaganda intensiva es necesaria en cualquier caso, tal como podemos ver en el comportamiento de todos los modernos Estados belicistas que extreman sus esfuerzos para moldear la opinión. Pero el Estado democrático debe trabajar con mayor perseverancia y rapidez. Y además, debe ser más hipócrita en la utilización de su retórica, que tiene que resultar atractiva para los valores de las masas: justicia, libertad, interés nacional, patriotismo, paz mundial, etc. Por lo tanto, en los Estados democráticos el arte de la propaganda debe ser un poco más sofisticado y refinado. Pero esto, como hemos visto, se aplica a todas las decisiones gubernamentales, no sólo a la guerra o la paz, dado que todos los gobiernos –pero en especial los democráticos– deben trabajar con perseverancia para persuadir a los ciudadanos de que todos sus actos de opresión están destinados a beneficiarlos. Lo que hemos dicho acerca de la democracia y la dictadura se aplica igualmente a la falta de correlación entre los grados de libertad interna de un país y su agresividad externa. Se ha demostrado que algunos Estados son perfectamente capaces de permitir un grado considerable de libertad dentro de sus fronteras mientras llevan adelante guerras agresivas en el exterior; otros Estados tienen un gobierno totalitario, pero su política exterior es pacífica. Los ejemplos de Uganda, Albania, China, Gran Bretaña, etc., encajan perfectamente en esta comparación.
Otro tipo de amor y compasión no se basa en algo que parece bello o bonito, sino que se basa en el hecho de que la otra persona, al igual que uno mismo, quiere ser feliz y no quiere sufrir y de hecho tiene todo el derecho a ser feliz y superar el sufrimiento. En función a ello, sentimos un sentido de responsabilidad, un sentido de cercanía hacia ese ser. Esa es la verdadera compasión. Esto es debido a que la compasión se basa en la razón, no sólo en el sentimiento emocional. Como consecuencia de ello, no importa cuál es la actitud del otro, ya sea negativo o positivo. Lo que importa es que es un ser humano, un ser sensible que tiene la experiencia del dolor y del placer. No hay ninguna razón para no sentir compasión siempre que se sea un ser sensible.
Esa es la verdadera época del amor; cuando creemos que sólo nosotros podemos amar, que nadie podría haber amado tanto antes, y que nadie nunca amará de la misma manera otra vez.