Sydney es más bien como un amante arrogante. Cuando llueve se puede negar que su amor y se puede encontrar difícil de identificar. No es un lugar que está construido para ser lluvioso o frío. Pero cuando el sol sale, murciélagos sus párpados, que es encantador, hermoso, atractivo, inteligente, y es muy difícil escapar de su atracción magnética.
El que tiene la luz dentro de su propio pecho transparente puede sentarse en el centro, y disfrutar de día brillante, pero el que esconde un alma oscura y pensamientos falta Benighted paseos bajo el sol del medio día, a sí mismo su propia mazmorra.
Me gusta el verano. Me gusta el clima cálido y los días largos. Yo soy una de esas personas tontas que todavía disfrutan tomando el sol - mis hijos están horrorizados!
Cada uno proyecta una sombra, no sólo su cuerpo, pero su espíritu imperfecto mezclado. Esta es su dolor. Que a su vez de qué manera lo hará, cae frente al sol, corta al mediodía, siempre en vísperas. ¿Nunca viste?
La conexión a otro, a la tierra, el viento, el sol, las estrellas, la luna... suena romántico, pero es la verdad - la experiencia visceral de movimiento, de moverse a través del tiempo en una máquina increíble - un par de coches toca en él, pero no demasiados en comparación con las motocicletas. Siempre sentí que cualquier viaje en motocicleta era especial.
Yo no pido el significado de la canción de un pájaro o de la salida del sol en una mañana brumosa. Ahí están, y son hermosos.
Ojalá yo nací en esa época: bailar con Fred Astaire y Gene Kelly, va a trabajar en el estudio vestido con pantalones hermosos, pañuelos en la cabeza y gafas de sol.
Usted obtiene dinero rápido, es hermoso, hay sol, pero al final del día, te enteraste que es todo una farsa, bebé. No es lo que parece.
Puestas de sol son tan hermosas que parecen casi como si estuviéramos mirando a través de las puertas del Cielo.
Y así nos quedamos hasta el rojo del amanecer comenzó a caer en la oscuridad nieve. Estaba desolado y temeroso, lleno de dolor y terror. Pero cuando ese hermoso sol comenzó a subir la vida horizonte era para mí otra vez.
El sol no espera a que se le suplique para derramar su luz y su calor. Imítalo y haz todo el bien que puedas sin esperar a que se te implore.
Cuando todos los días resultan iguales es porque el hombre ha dejado de percibir las cosas buenas que surgen en su vida cada vez que el sol cruza el cielo.
Los celos se engendran entre los que bien se quieren, del aire que pasa, del sol que toca y aun de la tierra que se pisa.
El ocaso de una gran esperanza es como el ocaso del sol: con ella se extingue el esplendor de nuestra vida.
El amor es para el niño como el sol para las flores; no le basta pan: necesita caricias para ser bueno y ser fuerte.
Vuestra fama es como la flor; que brota y muere; y la marchita el mismo sol que la hizo nacer de la acerba tierra.
El sol, el agua y el ejercicio conservan perfectamente la salud a las personas que gozan de una salud perfecta.