Un hombre excelente, como el metal precioso, es invariable ante todo; Un villano, un hombre con maldad, como las vigas en equilibrio, siempre variable, hacia arriba y hacia abajo.
Más bien, para todos los objetos y experiencias, hay una cantidad que tiene un valor óptimo. Por encima de esta cantidad, la variable se vuelve tóxico. Para descender por debajo de ese valor ha de ser privado.
Juzgamos que pronto, quiebra desordenada de Bear hubiera traído consigo consecuencias imprevisibles, pero graves para el funcionamiento del sistema financiero en general y la economía en general, con los precios más bajos de renta variable, más presión a la baja en el valor de las viviendas, y menos acceso al crédito para las empresas y los hogares.