Los jefes de entonces consiguieron desmotivar a los mejores comunicadores de España en un tiempo récord: Manel Fuentes, Concha García Campoy, Julia Otero, María Teresa Campos... todos los años se iba uno. Hasta que me fui yo.
Hay algo acerca de la compasión que hace la sociedad para decir: "Vamos a llevar a esta persona en serio." Tome la Madre Teresa. Ella era de confrontación sobre el aborto, pero ella no fue rechazado por la sociedad.