Todo comienza con el guión: no vale la pena irme lejos de mi familia si no tengo algo en que estoy muy apasionado.
Antes de irme a Alemania, que había llegado a la aceptación de artes escénicas de secundaria en Nueva York, que fue un gran sueño para mí. Y tener que dejar eso fue muy triste para mí.
Si me hubiese quedado tranquilo en mi casa en vez de irme a sufrir por el mundo, ¡no me habría ahorrado pocas penas y pocos zapatos!