La mayoría de las canciones que no son canciones de salto de cuerda, o canciones de cuna, son cuentos con moraleja o canciones de despedida y canciones carretera.
Ozzy quiso llevarnos de nuevo juntos. Ya han pasado 20 años. Hicimos un par de canciones durante su despedida en 1992 y que echó a rodar la pelota.
En el carro aceleró, y yo, al igual que mis compañeros, dio una mirada de despedida desesperado a la libertad como llegamos a la vista de los edificios de piedra de largo.
Sólo los malos jugadores tienen suerte. Ellos son los que rebotan las pelotas árboles, bordillos, las tortugas y los coches. Buenos jugadores tienen mala suerte. Al golpear la bola recta, una despedida divertida está obligado a tener mala suerte.