El recuerdo de mi propio sufrimiento me ha impedido nunca sombreado un alma joven y con la superstición de la religión cristiana.
Ningún estado secular nunca existió y no existirá hasta el final de la Revolución Francesa, y por lo tanto entendemos que los Estados Unidos se basa en la ética judeo-cristiana y creemos que este candidato va a velar por que se respeten esas verdades.
A continuación, el disco creado una enorme furor y me echaron de la televisión cristiana durante dos meses, y luego se restablece después de que se establecieron y escucharon la música y se dieron cuenta de que no había nada malo en ello.
Está claro que esta doctrina cristiana esencial da un nuevo valor a la naturaleza humana, a la historia humana ya la vida humana que no se encuentra en las otras grandes religiones orientales.
Para el estándar de vida cristiana debía ser tensas a un tono más alto, se requiere más ayuno, y la separación más cuidadosa de las costumbres y placeres del mundo, el celibato y el martirio tenían gran valor puesto sobre ellos, y se les prohibió segundos matrimonios.
La verdad, según la fe cristiana, es el amor de Dios para con nosotros en Cristo Jesús. Por lo tanto, la verdad es una relación.
La vida cristiana no es una alta constante. Tengo mis momentos de desaliento profundo. Tengo que ir a Dios en oración con lágrimas en los ojos y decir: 'Oh, Dios, perdóname', o 'Ayúdame'.
El movimiento feminista liberal nunca imaginó que las mujeres tomen en serio el impulso para convertirse en nuestros propios héroes y la vida reclamación por nosotros mismos, en nuestros términos, no importa lo que somos. Pro-elección y pro-vida, cristiana y no, pobres y ricos, negro, blanco, homosexuales y heterosexuales. Es un sueño que todos apreciamos, y se llama el Tea Party.
El matrimonio y la familia cristiana edifican la Iglesia. Los hijos son fruto precioso del matrimonio.
La zona interior es el primer lugar de la pérdida de la verdadera vida cristiana, de la verdadera espiritualidad, y el acto pecaminoso externo es el resultado.
La respuesta cristiana está contenido en estos dos dogmas fundamentales: el de la Trinidad y de la Encarnación. En el dogma trinitario Dios es uno, bueno, verdadero y bello, porque él mismo es amor, y el amor supone la una, la otra, y su unidad.
La esperanza es una virtud cristiana que consiste en despreciar todas las miserables cosas de este mundo en espera de disfrutar, en un país desconocido, deleites ignorados que los curas nos prometen a cambio de nuestro dinero.
La religión cristiana, que parece no tiene por objeto más que la felicidad de la otra vida, nos hace también dichosos en ésta.
La metafísica es una sustituta de la costumbre, como fuente y garantía de los más altos valores morales y sociales; una filosofía renovada y restaurada por la filosofía cristiana de la Europa medieval.