Mantener el amor en tu corazón. Una vida sin amor es como un jardín sin sol cuando las flores están muertas.
Si te fijas bien en un árbol te darás cuenta de sus nudos y ramas muertas, al igual que nuestros cuerpos. Lo que aprendemos es que la belleza y la imperfección van juntos maravillosamente.
La fe, como un chacal, se alimenta en los sepulcros, e incluso de estas dudas muertas que recoge su esperanza más vital.
Los incendios no se pueden hacer con brasas muertas, ni pueden ser provocados por el entusiasmo de los hombres sin espíritu. El entusiasmo en el trabajo diario aclara esfuerzo y resulta incluso trabajo en tareas agradables.
A menos que su utilización por los lectores les dan vida, los libros son en realidad las cosas muertas.
Contra el Estado, contra la Iglesia, contra el silencio de la profesión médica, en contra de toda la maquinaria de las instituciones muertas del pasado, la mujer de hoy se presenta.
No pienses en tus defectos, y menos aún de otra de las fallas, buscar lo que es bueno y fuerte, y tratar de imitarlo. Sus defectos irán desapareciendo como hojas muertas, cuando llega su tiempo.
La mayoría de las personas están muertas. ¿Sabía usted que? Es verdad, de todas las personas que alguna vez fueron, casi todos ellos están muertos.
Todo lo que sé es lo que saben las palabras y las cosas muertas, y que hace un poco de buena suma, con un principio y un desarrollo y un final, como en la frase bien construida y la larga sonata de los muertos.