Soy consciente de que las ideas de un filósofo no están sujetos al juicio de las personas comunes, porque es su empeño por buscar la verdad en todas las cosas, en la medida permitida a la razón humana por Dios.
Nunca será tarde para buscar un mundo mejor y más nuevo, si en el empeño ponemos coraje y esperanza.
El campo de batalla lo perdimos; mas voluntad invicta conservamos, odio inmortal, empeño de venganza, y el valor obstinado, que al temor la cerviz nunca ha doblado.