-Te casarás con un gran Lord, y gobernarás su castillo. Tus hijos serán caballeros y príncipes y señores. (Ned) -No. Esa no soy yo. (Arya)
Yo era poco más en el castillo, y la princesa me dio su mano a besar y luego traído a sus hijos, los jóvenes príncipes y princesas, y jugamos juntos, como si nos conociéramos desde hace años.
Simplemente por no ser dueño de tres castillos de tamaño mediano en la Toscana he ahorrado bastante dinero en los últimos cuarenta años sobre las primas de seguros por sí solos para comprar un castillo de tamaño medio en la Toscana.
La cocina es en realidad el propio castillo. Aquí es donde pasamos nuestros momentos más felices y en donde nos encontramos con la alegría de ser una familia.
Señora Presidenta, hablando aquí en el Castillo de Dublín, es imposible ignorar el peso de la historia, como si fuera ayer cuando tú y yo colocaron ofrendas florales en el Jardín del Recuerdo.
Así, el castillo de cada cacique feudal se convirtió en una escuela de la caballería, en la que cualquier joven noble, cuyos padres eran de la pobreza no puede educarlo en el arte de la guerra, se recibió con facilidad.
Lo que realmente traté de hacer con Helen fue a hacer su show este lado triste de ella. Ella se casó a los 16 años, era tan joven y vivir en este castillo que no pueden salir por la forma en que se ve, y se casó con un hombre que odia y tres veces su edad.
El hogar de todo el mundo es para él su castillo y fortaleza, además de su defensa contra las lesiones y la violencia, como para su reposo.