Frases de Georges Clemenceau

Todos los cementerios del mundo están llenos de gente que se consideraba imprescindible.

La diferencia entre un civil y un militar es que el primero siempre puede militarizarse, pero el segundo rara vez puede civilizarse.

Los hechos son el principio, el medio, el fin; hace un daño irreparable descansar sobre grandes discursos.

Manejar el silencio es más difícil que manejar la palabra.

Los tontos no gustan de admirar las cosas sino cuando llevan una etiqueta.

El hombre absurdo es el que no cambia nunca.

Un traidor es un hombre que dejó su partido para inscribirse en otro. Un convertido es un traidor que abandonó su partido para inscribirse en el nuestro.

Es preciso saber lo que se quiere; cuando se quiere, hay que tener el valor de decirlo, y cuando se dice, es menester tener el coraje de realizarlo.

La guerra es un asunto demasiado importante para confiárselo a los militares.

La vida del hombre es interesante sobre todo cuando ha fallado - Sé muy bien. Por que es una señal de que él trató de superarse a sí mismo.

Es mucho más fácil hacer la guerra que la paz.

Estados Unidos es la única nación en la historia que milagrosamente ha ido directamente de la barbarie a la degeneración sin el intervalo habitual de la civilización.

No sé si la guerra es un interludio durante la paz, la paz o un interludio durante la guerra.